martes, 15 de octubre de 2013

Si el destino nos cruzo, tal vez sea lo mejor.

Decía un amigo mío que las casualidades no existen. Que todo está escrito entre las nubes y las estrellas con tinta invisible. Que las personas van mezclándose en las páginas de las historias de otras personas para compartir y protagonizar un guión ya establecido. Mi amigo decía que todos somos actores principales y también secundarios, según la parte de la película en la que nos encontremos. Es una bonita manera de hablar del destino. ¿No crees?